Los ojos entreabiertos...

Hoy siento algo muy diferente a lo que he sentido en toda mi vida respecto a ciertas cosas que seria muy tonto y evidente mencionar, la cosa es que no se si se sea algo mas especial, algo mas fuerte, pero que va… me duele un poco y me mantiene la cabeza ocupada realizándome estigmas con la mirada, en los lugares precisos, en la hora adecuada. Tengo tantas ganas de poder compartir mis palabras agotadas de tanta espera inútil, de tanto susurrar frases bellas para un imaginario, para un muchacho construido en los sueños más profundos, de esos que ya no recuerdo. Hoy tuve una conversación que trataba no escuchar, porque no quería aceptar lo evidente. Es tan irreal, y no me gusta imaginarme tu mirada nadando en risas que no se si hacen vibrar tu cuello, que no se puede escuchar sus ritmos y melodías vivas… como decirte… que pasaría horas enteras observando tu semblante vibrante que se asemeja a la luna reposando en el agua de un río con historia contadas bajo sabanas, en donde creía que pasaría mucho tiempo que volvieran ciertos deseos, inocentes. Y en un comienzo solo eran estrellas imaginadas, que corrían y danzaban para mi anhelo intranquilo, para apaciguar la sombra de mis ojos cansados de ver tanto sol en rostros de otros, y llegas para probarme, para refregarme lo mal que estado, pero me das la mano, una mano que sostendría hasta al amanecer, en este momento, quisiera que te volvieras real, que acariciaras mi rostro, que me trataras suavemente, pero me mentiría, ya no estas, ya no quieres que te busque, quieres que desaparezca, ya es algo incomodo, es agotador pensar que nada ha ocurrido… que nos conocimos, que te miré, y sentí que podría nadar en tus brazos, pero esta es mi historia, la que invente, para no sentirme tan sola esta noche, noche como las otras, donde duermo abrazada con mi almohada que me quita un poco el frió de anhelar tanto y no poder realizar, y no poder saborear un poco mis fantasías, esos diálogos que invento cuando la luz de mi habitación ya no puede compartir más mi insomnio diario, cuando las paredes se cansan de escucharme llorar, cuando los personajes de tantas otras historia quieren dormir… es ahí cuando recurro a ti y pienso que algún día te encantaras de mi.

Quizás sea mas real de lo que aparentas ser...